Fantasía cotidiana
Taller de cuenta cuentos dirigido a padres, maestros, abuelos, mediadores y todas las personas que comparten historias con los niños
Hay diferentes maneras de contar nuestra historia personal. Podríamos comenzar por nuestros padres, la familia que nos precede y que, en cierta forma, nos define, porque desde nuestra primera infancia nos exponemos a las historias que les escuchamos. Ellos son los traductores de ese extraño paisaje que es el mundo y su narración, sus rumores, forman parte indivisible de nuestra propia historia.
Claro que también podríamos contarnos a partir del ahora: nuestra circunstancia, el colegio al que asistimos diariamente, el trabajo que tenemos, el día soleado que nos conforta, la brisa que nos llena de nostalgia. Y ese aquí y ahora, es el campo donde los niños juegan a la vida. En ese presente aparecen sus sueños, descubren sus miedos y comienzan a entender que sus madres no son una sola con ellos, sino otra. Que ellos mismo son otros. Únicos. Que a veces, aunque apenas tengan tres o cuatro años, quieren decirle al mundo “no quiero querer a nadie” y se largan al rincón más apartado para sentir los primeros vientos de independencia.
¿Quiénes somos? Una mixtura entre pasado, presente y futuro.
“La vida es el misterio que sorprende.
Soy vuestro ciego amargo.
La vida se descifra por su terror de antaño.
Y su gran canto de futuro lleno de signos luminosos”.
Escribió el poeta chileno, Vicente Huidobro.
Llenos de signos de luz entramos en la infancia y caminamos hacia la adultez. Llenas de signos de luz debieran ser las historias con que animamos el desarrollo de nuestros pequeños, para que logren descifrar esos terrores de su propia infancia, dotándolos de herramientas para el momento en que la vida los sorprenda o atraviesen momentos de oscuridad. Por ello, uno de los propósitos del taller de cuenta cuentos Fantasía cotidiana es acompañar a nuestros hijos en su desarrollo, tomando en cuenta el descubrimiento del mundo que hacen cada día. De esta manera, se buscará rescatar de la propia experiencia vital de los niños, aquellos aspectos que están siendo gravitantes en su desarrollo sicológico, psicomotor y social. Una vida que será reconstruida en la figura de un personaje ficticio, pero que se les asemejará mucho y que, como se trata de literatura y ficción, tiene las posibilidades de hacer cosas que en la vida real están vetadas.
Contenido
Lunes 11 de marzo:
*Se revisarán historias familiares de la vida cotidiana poniendo énfasis en las características de los propios niños a las que van dirigidas.
*¿Qué elementos distingo de su personalidad? ¿En qué momento del desarrollo se encuentra cada uno? Descubrir claves, tanto de su personalidad como de su desarrollo permitirá hilar relatos que se conecten con ellos.
*Escoger elementos propios de cualquier narración literaria con los cuales interpretar las historias: voz, foco, plano. Así mismo, ¿qué es lo que se cuenta, quién lo cuenta, cómo lo cuenta? La voz literaria en formato casero.
*La oralidad es de vital importancia para introducir a los niños en la fantasía real de su propia historia. Por lo tanto, se pondrá especial acento a algunas claves del relato oral: humor, suspenso, pausas entre diálogos, velocidad de la narración.
Miércoles 13:
Búsqueda de temáticas para narrar con los niños:
*Relatos que desarrollen sus intereses: el contacto con la naturaleza, los animales, apreciar la diferencia, descubrir la identidad.
*Otras temáticas necesarias en su desarrollo: miedos, aventuras, la edad de la obstinación y primeras demostraciones de independencia.
*Historias de roles con personajes propios de su entorno: mamás, abuelas, padres, hermanos, primos, maestras del jardín. Proponer personajes que sean significativos al propio entorno cercano de los niños.
Imversión: $100.000 (incluye las dos sesiones)
Informes e inscripciones: Espantapájaros Taller
Carrera 19A #104A-60, teléfono: 6200754 / 2142363
Tallerista: Sara Bertrand.
Escritora chilena. Estudió Historia y Periodismo en la Universidad Católica de Chile. Publica regularmente en la revista cultural Artes y Letras del diario El Mercurio y forma parte de su Consejo de Cultura. Fue becaria de la Fundación para el nuevo periodismo Iberoamericano, y su crónica Los acordes del mandinga forma parte del libro Que viva la fiesta (FNPI, 2010). También fue becada por el Consejo de la Cultura y las Artes de Chile por su libro Cuentos Inoxidables. Es autora de títulos dirigidos mayoritariamente a adolescentes, pero cuenta también con algunas obras para primera infancia como Y llovieron ranas (Alfaguara, 2012) y Ramiro Mirón (Alfaguara, 2010). Su última obra, Ejercicio de supervivencia, será publicada este año en español por Alfaguara y en francés por Zinnia Éditions.